Iré contrasentido y diré que la existencia es Caos. Que Eros es aquel impulso ordenador, la interpretación. Y Cosmos, la comprensión -o, aun mejor- un círculo de sentido.

Iré contrasentido y diré que la existencia es Caos. Que Eros es aquel impulso ordenador, la interpretación. Y Cosmos, la comprensión -o, aun mejor- un círculo de sentido.
Si en algún momento nos pusiéramos a pensar en lo contenido en un grano de arena, entenderíamos finalmente que es la prueba del tiempo, del cambio y, a su vez, de la eternidad.
Ella está en la proximidad, se ve de frente y se piensa en el horizonte. Percibe que la profundidad es la mayor de las alturas.